LA VARKOVA ME QUIERE CONOCER

Son las 10:33 de la mañana, y recibo un email de Tracy Greene con el siguiente encabezado "My name is Olga". A estas alturas todo el mundo se habrá dado cuenta que es spam, pero decido dedicarle unos minutos de mi vida. Curioso que la tal Tracy me presente a su amiga Olga, pero tiro para adelante, y me encuentro con esto:

Lógicamante estoy muy agradecido, porque normalmente lo que recibo son propuestas varias para alargar mi pene. Pues bien, la Olga (ya nos podemos tutear) me dice que se viene para España desde San Petersburgo, y entre otras cosas me ofrece sus medidas (detalle, oiga), su cumpleaños, y me habla de "develop our relations". Pero la Olga, lógicamente no puede fiarse del primero que pasa y necesita saber un poco más sobre mi:

El punto 5 me acaba de despejar las dudas: Olga sutilmente se me insinúa y está abierta a conocer la pasión en las cálidas tierras hispanas. Y se despide educadamente (no esperaba menos).

10:38: Envío a Olga Varkova a la papelera de reciclaje. Soy un ser sin escrupulos, un rompecorazones.

PD: Si alguien quiere conocer a mi amiga Olga, y ofrecerle lo que yo no puedo darle, esta es la foto que ella me envia (no tengáis duda, ella jamás os engañaría):

PRODUCTO CON NOMBRE SOSPECHOSO

CASSETTES CUTRONGOS

Cae en mis manos el siguiente maravilloso cassette:






Y sobre ello, brainstorming:

• Tienes un reproductor de cassetes (y funciona): O eres Marty Mcfly y, a bordo de un DeLorean, has regresado al pasado huyendo de la banda de Los Miami, o eres el famoso hombre desactualizado.
• Diseñadores de portada de cassete: ¿artistas incomprendidos o psicopatas en potencia?
• Gasolineras Campsa: el Fnac del siglo XX.
• Música electrónica de los 90: como los videos de Martes y Trece, los recuerdos son mejores que la realidad
  

Por suerte, las nuevas tecnologías y el avance de la sociedad, han provocado el desuso de este formato, la aparición del cd, con las pertinentes ventajas para el usuario y la industria, así como un salto cualitativo en los contenidos:

O quizás no?